Page 195 - El rostro de las letras

178 EL OJO DE LA HISTORIA
Director gráfico de La Ilustración Española y Americana, Juan Comba fue el primer repor- tero gráfico español en el sentido moderno del término. En esta fotografía de CORTÉS le vemos a la derecha, durante una cacería de Alfonso XII en las Tablas de Daimiel. El rey es el cuarto por la derecha. Diciembre de 1884. (Colección López Salvá)
de fotógrafos de toda España, amén de los que trabajaban en Madrid, como los hermanos Debas, Irigoyen y Manuel Compañy. El ejemplo más notable, el que define claramente la transición entre el grabado y la fotografía en la prensa, fue el de Juan Comba (1852-1924), magní- fico ilustrador y responsable de la edición gráfica de La Ilustración Española y Americana, que a partir de 1880 comenzó a utilizar la fotografía para ejecutar sus grabados, que realizaba directamente con un buril sobre planchas de madera de boj. Con una cámara de formato 13x18 adquirida en Alemania, no sólo obtenía pruebas directas sobre el soporte del boj, sino que hizo numerosos reportajes de una calidad apreciable. Acompañante asiduo del rey Alfonso XII, fue su cronista más leal y eficaz, como lo fue luego Campúa de Alfonso XIII. Por su conocimiento de las nuevas técnicas fotográficas y por su sentido mo- derno de las noticias, fue Comba el primer reportero gráfico español de los días de la Restauración. Sólo Heribert Mariezcurrena (Gerona, 1846-Barcelona, 1898), conocido por sus retratos de personalidades ilustres y por sus aportaciones en el campo de la estampación fotome- cánica, desarrolló un trabajo comparable para La Ilustració Catalana, en cuyas páginas se publicaron sus reportajes sobre los terremotos que asolaron las provincias de Córdoba y Málaga, en las primeras semanas de 1885.
En las postrimerías del siglo no estaba aún la fotografía en condi- ciones de competir con la destreza de los grabadores. Las placas de cristal eran lentísimas y las cámaras pesadas y de dimensiones