Este célebre lienzo del pintor Francisco de Zurbarán se presenta en Bogotá por primera vez en el marco del Foco Cultural España-Colombia. Podrá verse en la Casa de Moneda, sala expositiva dependiente del Banco de la República de Bogotá, durante dos meses, de septiembre a noviembre de 2018.
La obra representa un cordero, tumbado sobre una mesa con las patas atadas, en una actitud inequívocamente sacrificial. A pesar de que la falta de atributos religiosos sugiere que se trate de un bodegón, la mayoría de los estudiosos han interpretado el cuadro como una representación simbólica del Agnus Dei -Cordero de Dios, como se denomina a Cristo en el lenguaje litúrgico-. El cuadro, de ejecución impecable y elegante sencillez formal, es una muestra de hasta qué punto podían ser difusos los límites entre los géneros de la pintura religiosa y la naturaleza muerta, y tiene una gran importancia desde el punto de vista de la historia del bodegón.
La obra representa un cordero, tumbado sobre una mesa con las patas atadas, en una actitud inequívocamente sacrificial. A pesar de que la falta de atributos religiosos sugiere que se trate de un bodegón, la mayoría de los estudiosos han interpretado el cuadro como una representación simbólica del Agnus Dei -Cordero de Dios, como se denomina a Cristo en el lenguaje litúrgico-. El cuadro, de ejecución impecable y elegante sencillez formal, es una muestra de hasta qué punto podían ser difusos los límites entre los géneros de la pintura religiosa y la naturaleza muerta, y tiene una gran importancia desde el punto de vista de la historia del bodegón.
