Page 374 - El rostro de las letras

TIEMPOS NUEVOS
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Blanca de los Ríos (1859-1956) fue una escritora precoz. Pronto supo lo que suponía ser mujer en España. Fotografía de SANTOS YUBERO. Hacia 1930 (Archivo Regional de la Comunidad de Madrid. Fondo Fotográfico Martín Santos Yubero)
El otro gran retratista literario fue Ramón Gómez de la Serna, que
a lo largo de más de un cuarto de siglo fue desgranando magníficas semblanzas de sus compañeros de oficio, reunidas en Efigies (1929), Retratos contemporáneos (1941) y Nuevos retratos contemporá- neos (1945). Siendo en general piadoso, no olvidó Ramón el veneno cuando el personaje no era de su predilección, como Galdós, Pío Baroja y Cansinos Assens. Y aun entonces mostró una infrecuente honestidad, como en el caso de Baroja, “que nos ha conmovido la pa- ramera literaria de los últimos veinte años”. A Cansinos, con el que siempre anduvo a la greña, nunca le regateó insinuaciones malsanas y avilanteces impropias de un hombre de su talento, aunque acabó por reconocer “aquel puritanismo avisador que me fanatizó en otro tiempo”. Quizás por flaquezas como estas, necesitó Ramón vindicar luego su condición de hombre independiente y sin tacha, “para tener siempre la libre opinión y la libre palabra”. Así fue trazando aquellas biografías suyas hechas a saltos, como a impulsos de su genio, des- labazadas en apariencia, pero siempre brillantes y admirablemente escritas. Entre los cientos de escritores de los que nos ha dejado su retrato, se advierte enseguida su desdén por los necios y campanu- dos, su simpatía por los que buscaron sendas propias para sus vidas arrasadas. Como él mismo. El colofón fue su Automoribundia, que fue escribiendo en secreto y que se propuso sincera como ninguna, cercana a “pormenores de espanto”. Sólo entonces dimitió Ramón como biógrafo, como grandísimo muñidor de vidas ajenas, en las que siempre se percibe la sombra de la suya propia.
Página anterior: Nacidos entre 1885 y 1899, Corpus Barga, Julián Zugazagoitia (en la mis- ma fotografía), Josep Maria de Sagarra, César Arconada y Joaquín Arderius, representan una ilustre generación de fronterizos que, con la excepción de Sagarra, sufrió las heridas
del exilio. Zugazagoitia fue secuestrado en Francia, conducido a España y ejecutado. Fotografías de SANTOS YUBERO, PADRÓ y DÍAZ CASARIEGO tomadas en los días de la República (Archivo Regional de la Comunidad de Madrid. Fondo Fotográfico Martín Santos Yubero y MEDC, AGA, Fondo MCSE)