Page 145 - El rostro de las letras

128 RETRATOS PARA TODOS
es el de Teodoro Llorente (Valencia, 1836-1911), el más ilustre apóstol de la Renaixença en su tierra, animador de los Juegos Florales, maes- tro él mismo en “gay saber”, y alma del nacionalismo burgués, que capitaneó desde las tribunas del diario Las Provincias y de la agrupa- ción “Lo Rat Penat”, pedánea del emergente catalanismo en Valencia. La Ilustració Catalana le dedicó un número extraordinario en el que incluyó una docena de retratos suyos y un generoso reportaje gráfico de su multitudinario entierro en las calles de Valencia, realizado por Gómez Durán. En estas fotografías de Llorente y de las decenas de escritores de su tiempo hoy olvidados, se fue creando un imaginario gráfico del país, y con él, la percepción que de sus escritores tenían los ciudadanos. Una imagen que comenzó a cambiar cuando, por exigen- cias de los editores de la prensa gráfica, los fotógrafos debieron aban- donar sus estudios para retratar a los ciudadanos ilustres en sus ámbi- tos familiares, en las redacciones de prensa, los despachos y ateneos. El retrato fotográfico sufrió entonces una profunda mutación, que aportó una mayor naturalidad y sencillez, frente a la relamida artifi- ciosidad de los estudios. Nada tienen que ver las imágenes de Bécquer,
ANÓNIMO. Retrato de Leopoldo Alas, Clarín. Hacia 1885 (Biblioteca de Asturias Ramón Pérez de Ayala. Depósito Tolívar Alas)
A la derecha, retrato de Clarín incluido en la orla de la Universidad Literaria de Oviedo. Fotografía de CONDE CAMINERO, 1900 (Casa de Cultura de Luanco)