Page 112 - Escritura experimental en España, 1963-1983
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Escritura ExpErimEntal En España, 1963-1983Joan Rabascall: Symphonie inachevée, 1965de pintar, mientras que los artistas del Grup de Treball se enfrentaron a la institución artística, negando la pintura, la poesía y el resto de las artes a la vez que acentuaron la «carga ideológica» de su discurso con tintes sociales de lucha de clases, tan socorridos en los ámbitos de la lucha antifranquista.Es precisamente esa abominación de lo pictórico lo que les enfrentó a Antoni Tàpies y les hizo autodenominarse «conceptuales», en un intento de diferenciación con respecto a los «poetas experimentales» que, al n y al cabo, eran tan poetas como los informalistas eran pintores. Si los poetas pasaron de la escritura convencional al uso de las imágenes, el collage y otras formas plásticas o sonoras, los conceptualistas, que habían dejado de pintar, se sirvieron de la escritura como forma de arte de diferentes maneras, pero establecieron una cesura clara para separarse y diferenciarse de los poetas visuales, empezando por Joan Brossa.No vamos a entrar aquí a argumentar ni discutir las diferencias entre experimental y conceptual, distintas caras al n y al cabo de una misma moneda, ni la manera en que los artistas del Grup de Treball y sus continuadores se apropiaron del término ‘conceptual’ en detrimento de ‘experimental’, pero sí es necesario recordar que, aunque ellos no se consideren a sí mismos ni escritores ni experimentales, algunos de estos artistas hicieron importantes aportaciones a la experimentación.Por ejemplo, Joan Rabascall, que había emigrado a París en 1962 donde entró en contacto con el crítico Pierre Restany y con el Nouveau Réalisme, el letrismo y la poesía visual, y empezó a mediados de los años sesenta a servirse de imágenes tomadas de los medios de masas, carteles callejeros y revistas, que recortaba metódicamente y reordena- ba en forma de collages que en ocasiones ocupaban retículas geométricas.289 A pesar de la289. Collages de este tipo fueron presentados en su primera exposición en la Galerie Zunini de París, que estuvo abierta del 13 al 29 septiembre de 1966 y que contó con un texto de Pierre Restany.116