Page 109 - Escritura experimental en España, 1963-1983
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Escritura ExpErimEntal En España, 1963-1983y Alarma,280 realizados a partir de 1973 y publicados a mediados de esa década, es decir, inmediatamente después de conocer a Ignacio Gómez de Liaño.En Frases Ullán alterna caligramas, palabras encontradas y fotografías tomadas en el entorno cotidiano de su propio domicilio. En De un caminante enfermo recurre al collage fragmentando y recortando hojas de papel de periódico con las que realiza com- posiciones apoyándose en líneas y  guras geométricas ejecutadas en opaca tinta negra. En Alarma se aprecia el empleo de dos procedimientos diferentes y complementarios: los trazos que tachan unos textos previamente impresos y el reencuadre de palabras concre- tas de ese texto que, al destacarlas, con guran un hipertexto autónomo.Si la in uencia de Ignacio Gómez de Liaño parece innegable en las obras de Ullán de estos años, muy particularmente en De un caminante enfermo, se pueden también reco- nocer ecos de los procedimientos desarrollados por Julio Campal en sus caligramas o por Fernando Millán en el empleo de la fotografía como elemento textual, además del uso de otras técnicas de expresión que son características de la experimentación, y, desde luego, se puede apreciar una sintonía formal con la obra de otros poetas y escritores presentes en esta exposición.En estas obras comentadas no se percibe, ciertamente, un afán de ruptura, sino más bien una expansión de los medios expresivos, que parte de una estética próxima a los Novísimos, pero que se apoya también en las experiencias visuales, lo que le condujo hacia un conceptismo minimalista, en el que hace hincapié en la experimentación verbal y sintáctica y en la re exión  losó ca.A continuación, Ullán escribe y dibuja con la pluma y aplica color a los trazos con el pincel consiguiendo realizar un tipo de obra muy particular y expresiva que él denominó «agra smos», trazos y signos grá cos, como garabatos inconscientes más próximos al informalismo de Henri Michaux que a la poesía visual y sobre los que el propio José-Miguel Ullán ha explicado que surgían buscando las palabras, mientras que la inspiración poética no hace acto de presencia.La caligrafía del dibujo tiene algo más primitivo y libertino, menos domesticado que aquello que articula la escritura [...] Por eso, al dibujar de manera espontánea (sin la exigencia de un artista plástico, sino como desahogo de escritor) hay algo inaugural, no  jado del todo, que enseguida se impone a su hibridez y que ahí se queda, a su aire, mien- tras que en la escritura todo tiende a amoldarse, a darse en forma y, en de nitiva, a rendir cuentas. Cada dibujo, en cambio, es un sobresalto sin molde.281Ante este tipo de trabajo hay que plantearse aquí dos cuestiones, la primera es si se puede distinguir hasta qué punto esa hibridez del trazo caligrá co del escritor no es o tiene la pretensión de ser obra plástica. La segunda es que la mayoría de estos poemas dibujados y pintados son trabajos tardíos o, al menos, posteriores al período temporal  jado en esta exposición.282 Pero, sin duda alguna, esa experimentación con280. José-Miguel ullán: Frases, 1975; Alarma, 1976; De un caminante enfermo que se enamoró donde fue hospedado, 1976. 281. Citado en Manuel Ferro (ed.): José-Miguel Ullán, ob. cit., p. 16.282. Estos trabajos se han publicado en José-Miguel ullán: Con todas las letras, 2003; Ondulaciones. Poesía reunida(1968-2007), 2008; Lámparas, 2010; Manuel Ferro (ed.): José-Miguel Ullán, ob. cit. 113


































































































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