Page 24 - EL FUTURO NO ES DE NADIE TODAVÍA. EUGENIO AMPUDIA

mento, se dispone a dormir. Cerrar los ojos. Dar la espalda a la pintura también.A Ampudia le tengo por una persona que espera un segundo antes de empezar. No sé si es así en realidad, pero cada uno es responsable de sus percepciones. También le tengo por alguien con una capacidad irónica y que, desde la corrección y la educación, es capaz de desmontarlo todo logrando que, además, le demos las gracias. En las veces que hemos coin- cidido, que no son muchas, he tenido la sensación de que era importante escucharle y estar muy atento a cómo observaba su alrededor. Un sujeto de mirada particular, supuestamente distante pero completamente imbuida y preocupada. Esperar un segundo antes de empezar podría indicar autocontrol, tam- bién capacidad para estar atento para leer una situación de- terminada. Estar abierto, buscar información, buscar com- prender para poder, después, aparecer. Las propuestas artísticas de Ampudia tienen también algo de esta actitud: momentos que se aparecen unos segundos más tarde sea mediante la confusión o la alteración de la normalidad. Desde un ordenador portátil imposible de utilizar al ser construido en piedra, al ser escultura y obra de arte. La función de ítem a admirar sigue y el salto a la escultura —perfecta, clásica— con- vierte el objeto de consumo en algo equivocado. Pero la pri- mera impresión es que se trata de un ordenador y nada más. Nuestra fascinación como sociedad para la tecnología, el úl- timo producto, lo nuevo, lo nuevo. El admirar y el mirar. Y hastaWorkstation, 2012 Escultura en alabastro 25 x 35 x 32 cm24 | EUGENIO AMPUDIA. EL FUTURO NO ES DE NADIE TODAVÍA