Page 109 - Carlos III. Proyección exterior y científica de un reinado ilustrado

MARÍA JESÚS VIGUERA MOLINS*
LUCES SOBRE AL-ANDALUS:
SAPERE AUDE
EILUSTRARSE EN NUEVOS HORIZONTES
l intenso fervor de los Románticos por al-Andalus, y por lo “oriental”, llevaría a pensar que antes no hubo aprecios, pero existieron, muy con- siderables, sobre todo por el razonado interés europeo hacia lo árabe, que en el XViii trajeron los Ilustrados, dentro del lógico afán plasmado por
Kant en imperativo: Sapere aude!, que era un reto: ¡atrévete a saber!, sin trabas previas ni anatemas. El más temperado brillo racional del Siglo de las Luces presentó, ante nuevas circunstancias, imágenes más serenas y enfoques más completos que destaca- ban la naturalidad con que debía ser averiguado el mundo entero, y también la cul- tura árabe y en general la civilización islámica, comprobándose razones, gusto y uti- lidad de conocer, sin filtros ni prejuicios, al Otro por antonomasia, el Islam, directamente expresado por sus propias fuentes.
Con este planteamiento, ofrecemos algunos datos y apreciaciones sobre cómo los Ilustrados, con su actitud innovadora, abordaron al-Andalus, aun reconociendo que ninguna categoría es tajante, pues rasgos más o menos precoces o tardíos pueden manifestarse, ya que perfiles del arabismo más racional continuaron en pleno apogeo romántico: ¿no fue así con Johann Wolfgang von Goethe1 (1749-1832)?: su West Östlicher Divan reconoce con entusiasmo que hay un “Magnífico Oriente, que el Mediterráneo cruzó”, a la vez tan ilustrado como romántico. También el orientalismo sentimental tuvo precedentes, como en William Shakespeare (1564-1616)2.
* Universidad Complutense de Madrid y Real Academia de la Historia.
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1. FiNK, Karl J. “Goethe’s West Östlicher Divan: Orientalism restructured”. International Journal of Middle East Studies (Cambridge). 14 (1982), pp. 315-328.
2. HARlOW, Barbara. “Sentimental Orientalism: Season of migration to the North and Othello”. Al-Abhath (Beirut). 32 (1984), pp. 75-79.