“Picasso escultor. Materia y cuerpo” es la primera gran exposición en España dedicada a esta faceta picassiana. La selección de obras quiere subrayar el papel central que tuvo para el artista malagueño la representación del cuerpo humano entendido como totalidad y también como fragmento.
Al igual que en el resto de su producción artística, la escultura de Picasso se distingue por la innovación y el uso de técnicas y materiales poco ortodoxos. El desarrollo de su obra se entiende como una alternancia entre el modelado y la construcción, bien en hierro soldado, en madera o chapa de metal, incorporando el vacío como un nuevo elemento que fue crucial para la escultura moderna.
La interrelación que llevó a cabo entre las diversas disciplinas artísticas está presente en los principios cubistas de su pintura que traslada a las tres dimensiones en la escultura; o en el uso de materiales encontrados que al igual que en sus collages, utiliza para crear obras tridimensionales. Dibujos y planos de papel recortado en dos dimensiones se traducen a hojas de metal que se doblan hasta elevar su volumen. La chapa recortada y doblada sería el último material con el que Picasso se define como escultor, que trasladada al hormigón o al acero corten dará lugar a obras monumentales a escala arquitectónica.