La exposición nos adentra, a través de 200 piezas, en el mundo de actores, bailarines, escenógrafos, directores de escena, titiriteros, payasos y otros oficios performativos y pluridisciplinares como el baile, el circo, el cuplé, la revista, el music-hall, la copla, el cabaret, las arquitecturas efímeras ligadas al carnaval o los experimentos cinéticos y cinematográficos que tuvieron un inusitado auge entre 1900 y 1936.
La palabra que da título a la exposición, "Intermedios", hace precisamente referencia a los territorios creativos formados de la asociación conceptual y material de formas creativas en las que se fusionan y vinculan distintos medios, campos y actividades en torno al espectáculo. En el contexto trágico y convulso de la España de aquellas décadas, suponían las artes en vivo un paréntesis temporal de lo cotidiano, por lo que adquirieron relevante protagonismo la magia, la ensoñación, la revista musical, el carnaval o la imaginería surrealista.
Las artes escénicas vivieron en España, entre los años 1900 y 1936, un periodo "de Plata" en el que se intercambiaron espacios y lenguajes con otras disciplinas y lenguajes artísticos, creando curiosos subgéneros, fruto de la mezcla de expresiones escénicas, literarias y parateatrales complejas y poliédricas. Este ámbito y esta época fascinantes son los protagonistas de este proyecto, una propuesta expositiva amplia y de carácter abierto.
Durante el primer tercio del siglo XX la cultura española se vio intensamente condicionado por un convulso contexto social y político, a nivel nacional e internacional. Se produjeron importantes cambios en el ambiente de una España agitada, jalonada de acontecimientos trágicos, que marcaron profundamente el devenir de su historia. La Guerra Civil puso el punto final a este periodo y sumió en el olvido a gran parte de sus protagonistas. Para una parte de la sociedad española esta cultura del nuevo espectáculo de marcado carácter audiovisual supuso un paréntesis temporal de lo cotidiano, donde la magia, la ensoñación, el carnaval o la maravilla fueron sus protagonistas. De las diferentes artes escénicas y sus subgéneros, se desprende un carácter lúdico dominante, una incursión propia y tragicómica del sentido del humor que invadió el género del espectáculo en su dimensión más amplia.
El devenir del arte en el siglo XX vino a demostrar en todo el mundo la importancia que tuvieron las artes escénicas en la construcción de lo que hoy entendemos como arte contemporáneo. La transformación que se produjo, fruto de la inserción de nuevas formas teatrales y la influencia del simbolismo decimonónico en países como Alemania, Estados Unidos, Francia, Italia o la Unión Soviética fue más significativa y radical que en España. Ello no quiere decir que en nuestro país no ocurriera también a otra escala y en otro tiempo. Aquí, en este periodo, entre otros logros se forjó una suerte específica – lo español, la españolada-, que daría una proyección internacional a parte de nuestra cultura.
El desarrollo artístico en la España del primer tercio del siglo XX tuvo una relación directa con los géneros populares, sus protagonistas y obras. El periodo escogido coincide con la denominada “Edad de Plata” en España que tuvo su máximo exponente en la producción literaria y que recogió a tres generaciones de escritores reconocidos a nivel mundial: la Generación del 98, la del 14 y la del 27.
Carteles, bocetos, fotografías, títeres, piezas de vestuario, películas documentales, cortos de ficción o programas de mano conforman este sugerente viaje que nos propone "Intermedios" por unos años de vitalidad creativa y ruptura estilística que se vieron truncados por la Guerra Civil.
La palabra que da título a la exposición, "Intermedios", hace precisamente referencia a los territorios creativos formados de la asociación conceptual y material de formas creativas en las que se fusionan y vinculan distintos medios, campos y actividades en torno al espectáculo. En el contexto trágico y convulso de la España de aquellas décadas, suponían las artes en vivo un paréntesis temporal de lo cotidiano, por lo que adquirieron relevante protagonismo la magia, la ensoñación, la revista musical, el carnaval o la imaginería surrealista.
Las artes escénicas vivieron en España, entre los años 1900 y 1936, un periodo "de Plata" en el que se intercambiaron espacios y lenguajes con otras disciplinas y lenguajes artísticos, creando curiosos subgéneros, fruto de la mezcla de expresiones escénicas, literarias y parateatrales complejas y poliédricas. Este ámbito y esta época fascinantes son los protagonistas de este proyecto, una propuesta expositiva amplia y de carácter abierto.
Durante el primer tercio del siglo XX la cultura española se vio intensamente condicionado por un convulso contexto social y político, a nivel nacional e internacional. Se produjeron importantes cambios en el ambiente de una España agitada, jalonada de acontecimientos trágicos, que marcaron profundamente el devenir de su historia. La Guerra Civil puso el punto final a este periodo y sumió en el olvido a gran parte de sus protagonistas. Para una parte de la sociedad española esta cultura del nuevo espectáculo de marcado carácter audiovisual supuso un paréntesis temporal de lo cotidiano, donde la magia, la ensoñación, el carnaval o la maravilla fueron sus protagonistas. De las diferentes artes escénicas y sus subgéneros, se desprende un carácter lúdico dominante, una incursión propia y tragicómica del sentido del humor que invadió el género del espectáculo en su dimensión más amplia.
El devenir del arte en el siglo XX vino a demostrar en todo el mundo la importancia que tuvieron las artes escénicas en la construcción de lo que hoy entendemos como arte contemporáneo. La transformación que se produjo, fruto de la inserción de nuevas formas teatrales y la influencia del simbolismo decimonónico en países como Alemania, Estados Unidos, Francia, Italia o la Unión Soviética fue más significativa y radical que en España. Ello no quiere decir que en nuestro país no ocurriera también a otra escala y en otro tiempo. Aquí, en este periodo, entre otros logros se forjó una suerte específica – lo español, la españolada-, que daría una proyección internacional a parte de nuestra cultura.
El desarrollo artístico en la España del primer tercio del siglo XX tuvo una relación directa con los géneros populares, sus protagonistas y obras. El periodo escogido coincide con la denominada “Edad de Plata” en España que tuvo su máximo exponente en la producción literaria y que recogió a tres generaciones de escritores reconocidos a nivel mundial: la Generación del 98, la del 14 y la del 27.
Carteles, bocetos, fotografías, títeres, piezas de vestuario, películas documentales, cortos de ficción o programas de mano conforman este sugerente viaje que nos propone "Intermedios" por unos años de vitalidad creativa y ruptura estilística que se vieron truncados por la Guerra Civil.
