Page 197 - Delibes

ampliar horizontes huir de lo que «La esDcreiltiubreas ndoijoe:s«uHneaparsoafedsoiómnesdiinao Una vocación
conocíamos y y no no obstante compren-unavivdoacacliaóniredeliibnrfeelyi csidi adlg»o dlaijmo eGne-or-
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de de infelicidad
díamos el el el resquemor de de Daniel quege Stoi meesnnoon hqauber spiansaedmobtarmgob iéen leasos
podía llegar a a a a a a a a ser también el el nues-
momoterantmosedeira» uMnoe dresluolstaesicmriptosriebslemás leídpoesndsealrmenuneldeosycreistocriybínaouenvolicbarrola trascaoztar olqauiemsaugsenledcteorloes hleomqubirteasbaconn conlancsaineadnaad edne lascamdaenrao s s s s s s loNsoansetipguodoísa decairmeannaebcesroelusthoeqlaudeosudveidnaovhieumbiberea sidolousnrefgraucearsoos nqui equceortruíavnierpaormlaotsivos
Gustavo Martín Garzo
tro En el discurso de ingreso en la Academia Delibes declaró lo si- guiente:
[ ] a a a a a a a a a a a lo que renunciaba Daniel de qcauleljeas sTinamaspfoacltoarMyigunelcaDmepliobedsesd-e-
me dejé arrastrar por una precoz
nostalgia de de lo que estaba desapa-
naj«eesl idioma rural de la generación vieja» anotando como hacía él cadMaidsicphro pcioasdapegrisron Eajlersemcheazhoaa- todboíalon qduieseoclaiedroa naopquueebdloaby aadleamí
reciendo y de lo que que sabía que que iba a a a a a a Miguel Delibes en en en una imagen deessuaaprcahriveocfeamr idliaerl todo bíaptoejanderolodse lopsueslempoecnotsosesidcreiatloirzeasdhosan alcaeniznacdluoseonfavlisdeadeons nquesotrfroeicdeinoma un bruecoónlioccoismdiesnctaonysousneaneustniamsanmo ayor gramciaensoassbuscólilbicraos cpaesraostraumrablieésn céol n n n ensusdcishciumresnoedaesasgiermadperceimeniecnentodipdoars lacsounlceñsaióinmdpeolluPtraemdiisopuCeesrtvaaenntecse s-
habtlaóscyomsuosScaimeansopnridmeolraoisnafmeleicnitdead
el el Mochuelo era a a convertirse
en cómplice de de un progreso de de dorada apariencia pero absolu-
tamente irracional [ ] donde
el el poder del dinero y la organi-
zación —quintaesencia de este
progreso— termina por conver-
tir en en borrego a a a a a a a a a un hombre sen- a a a a a a a a a quesetisruadaesdiycasciniónhuamlaedeasdcr iDtuereaslteos sible [ ] habeílaemllevnatdoso scuonrgelnpalsgoudnealstdiemlapso Habría sido imposible que yo enten-
diera esas palabras entonces como las entiendo ahora Jamás habría asentidoanteellascomoasiento
ahora Existe un gran trecho entre el instante en en que se genera una experiencia y el instante en en que se reverencia lo vivido y no se trata
tanto de una distancia temporal
como emocional Cierto que la me-
lancolía viene a a a a a alterarlo todo con sus rosados colores de de idealización Pero a a pesar de de de mis deseos de de de hui-
da de de de mis aspiraciones a a a a a a a a a heredera El deixspcruersioneessu naalgruenfloesxtiéórnmdiensoesn cnaonta- de de las Brontë como la la niña cons- da seorabnreloesemoáfisciaoddeecunaadrorsary qauleaovbelizg a a a a a á a a a a a a a cientequefui creoqueyaporen- aqudeiesnculborpirmacetiacahoaraol(vyidmaersaetdrevsoua tonces con la lectura de El camino proupsiarvliadafreansepodse dDeeliabsesd)erasustsrepaenrsdo-
contradicciones a a a a las que me refería antHese vLivaidreoplualsviódnapcormloaucanzvai -por lossdioisnpaarriosespqeurdiziodforsénqiuceo m[ at]a rEon
a a a a a a a aclagduanonodveemlais[eplenrorvoes lipstoar]lassum- e e e e e e ciepdapdeylelsadviifoelreenctieasdpealraaccaibónar(el horcroonrvdiretiléan«dmosileaenna ubnonviitsai omnailraiona boneistqau»i)zyo farélnaicvoez[ la] fPaassciénlacivóinda pordliasfraacztiávnidaomdceodnelaotqrouse[t a a a á a a a n] tDois- disfrauztarbsaeelrpaaedlrjeu eLgao maváegriscioóndel
al al vhionmo berleoqluore dselevnitnroe gya baalfaruvietzi va- el el dmeesneotedae lapirmenadgeinr acbióenbesrindaeldver- portriróncuaácnhtoardroe souaplrgoapriraes ucostmaoncia hacsíealne yibcareonrceacdoarddaersqduobeldaemciíeanto ellos La certeza de que algunas