Page 170 - Carlos III. Proyección exterior y científica de un reinado ilustrado

19. KuETHE, Allan J. “Imperativos militares en la política comercial
de Carlos III”, en KuETHE, Allan J.; Juan MARCHENA (editores). Soldados del Rey. El Ejército borbónico
en América colonial en vísperas de la Independencia. Castellón: Universitat Jaume I, 2005, pp. 149-159.
20. Para una introducción a estas cuestiones puede consultarse: HilTON, Sylvia L. La Alta California Española. Madrid: Mapfre, 1992.
21. Véase: LuQuE TAlAVÁN, Miguel; José María FERNÁNDEZ PAlACiOS. “Fortificación y defensa de los puertos novohispanos del Galeón de Manila en el siglo XViii”, en
CRuZ FREiRE, Pedro; Ignacio J. LÓPEZ HERNÁNDEZ (coordinadores). Ingeniería e Ingenieros militares en
zona presentaba una problemática propia y que, para conservarla, era necesario introducir cambios.
A nivel general, la ocupación británica de las plazas de Manila y La Habana durante la Guerra de los Siete Años (1756-1763), supuso un cambio trascendental en la política reformista borbónica. La alarma acerca de la fragilidad de las defensas americanas imprimió un nuevo sentido nítidamente defensivo a las reformas promo- vidas por Carlos III. Momento desde el cual muchas de las medidas transformadoras tendrían una clara dependencia y supeditación a los intereses militares19.
Esta política global para el océano Pacífico, que dio entre otros resultados la estabilización de las fronteras de las Californias, perseguía no sólo la consolidación y resguardo de las fronteras septentrionales de la Nueva España, sino también la defensa de la tradicional ruta del Galeón de Manila. De este modo fue configu- rándose, de forma progresiva, una red de pequeños puertos y fondeaderos, con sus respectivas dotaciones defensivas en diversos lugares de California, así como en otros puntos del litoral novohispano para apoyar la navegación del Galeón de Manila20, y servir al objetivo de la Corona de ir consolidando su presencia en esta amplia región21.
MIGUEL LUQUE TALAVÁN 168
Umete o recipiente para el consumo de kava,
que fue un regalo destinado a Carlos III que
el rey Pomare I de Tahiti entregó al marinero Máximo Rodríguez, durante la segunda expedición a esta isla. Realizado en dolorita negra, procede
del marae Taputapuatea, en Punaavia. Museo Nacional de Antropología (Madrid). Cat. no 97.
Fue desde el Apostadero de San Blas —nueva pieza clave en la política de control de las costas novohispanas así como de la expansión hacia el Norte cali- forniano desde la década de los setenta del siglo XViii— desde donde se llevaron a cabo, de 1774 en adelante, las importantes