Page 80 - I estoria-ta: Guam, las MarianasI estoria-ta: Guam, las MarianasI estoria-ta: Guam, las Marianas y la cultura chamorra
P. 80
80
pasara a realizarse en una situación de mayor desigualdad. Las mujeres chamorras sufrieron así ese doble proceso de subordinación tan característico del colonialismo: a los agentes coloniales y a los hombres de su propio grupo. Los hombres chamorros también padecieron subordi- nación, pero debió ser en paralelo al empoderamiento sobre sus propias mujeres a través de la institución del matrimonio, las nuevas formas de parentesco patrilineal y los nuevos cargos políticos de los que ellas quedaron excluidas (Souder, 1992: 224-5).
Como apuntaba antes, las actividades de manteni- miento sostuvieron también continuidades culturales importantes. Es el caso de la manufactura textil con hojas de cocotero y pandano (Anderson-Taft, 2019a; Auyong, 2019; Flores, 1999, 2021b; Tolentino, 2021e), reivindicada actualmente como parte de las Kostum- bren CHamoru (https://www.guampedia.com/voices-o- f-our-elders/), una rúbrica que se refiere a prácticas y valores tradicionales con la que expresar la identidad chamorra y defender la continuidad cultural. Los objetos de palma eran un elemento imprescindible del día a día chamorro tanto antes como después de la reducción. La relación de Juan Pobre de Zamora menciona esteras (que se emplean a modo de colchones y mantas), me- sas para comer, sombreros, cestas para enviar regalos o transportar nueces de betel, cajas para albergar los
cráneos de los ancestros o cubiertas para los difuntos (Martínez, 1997: 444, 447-448, 451). Fuentes anteriores también mencionan la técnica para elaborar las velas de las embarcaciones (Kerr, 2013: 22; Donoso, 2016: 2-3) y cestas para transportar proyectiles de honda (Kerr 2013: 23). Todos estos usos se confirman en las fuen- tes ya coloniales del siglo xvii, que también añaden la confección de cortinas y esteras para las paredes de las casas (Lévesque, 1995b: 124); de pequeñas cestas para recoger el alma de los fallecidos y de ornamentos para las calles cuando el entierro es el de un principal (Sanvitores et al., 1671: 125); de sandalias (Lévesque, 1995b: 39; 1995c: 429); o de cunas, de platos donde servir comida, e incluso de una especie de armadura (Lévesque, 2000: 12, 27). Algunas cartas anuas nos infor- man también de que, en los colegios jesuitas, las niñas confeccionaban esteras de palma además de aprender a tejer y coser con los nuevos materiales traídos de fuera (e.g. ARSI, Antica Compagnia, Philipp. 14, f. 82r).
La persistencia en la manufactura y empleo de esta cultura material Latte sin duda contribuyó a mitigar la desazón y desorientación que debió seguir a la reubi- cación forzosa en las reducciones, lejos de las tierras de sus ancestros, y a la renuncia forzada de muchas tradiciones. A través del trenzado de fibras vegetales y de su transmisión a las generaciones venideras, las
2 HUGUA. EL PERIODO COLONIAL
Figura 32: Cestería CHamoru realizada con hojas de pandano, a los lados bolsas kostat tengguang, en el centro cestas (1886-1887). Colección MNA, de izquierda a derecha y de arriba abajo: CE2139, CE6996, CE2138, CE6993. Fotografía: Javier Rodríguez Barrera.