Page 23 - I estoria-ta: Guam, las MarianasI estoria-ta: Guam, las MarianasI estoria-ta: Guam, las Marianas y la cultura chamorra
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También se han reinterpretado y se muestran bajo estas coordenadas las colecciones museográfi- cas y documentales «chamorras» del MNA y de otras instituciones madrileñas como el Museo de Améri- ca, el Museo Naval, el archivo a él asociado, el Real Jardín Botánico y la Biblioteca Nacional, cuya exhi- bición ofrece al fin y al cabo, como en cualquier ex- posición temporal, la trama básica sobre la que se va tendiendo el hilo argumental primario de ese relato, el cual, visto más en detalle, está articulado según la siguiente estructura:
5. BIBA CHAMORU!: un viaje en el tiempo para mirar al futuro
5.1. Poblamiento y periodos Prelatte y Latte
Tras recorrer el espacio de acogida que nos introdu- ce en los contenidos de la exposición, la primera sala resume la historia de las Marianas hasta la coloniza- ción española. Eso incluye a los primeros contactos con europeos, empezando por Magallanes y su gente, pues, aunque sin duda van a servir para preparar la efectiva dominación colonial, en ese momento, y en ese contexto, no son más que hechos aislados y de limitadas consecuencias inmediatas.
Tras abordar la cuestión de cómo se produjo el primer poblamiento en las islas, una cuestión aún no del todo resuelta, la exposición se ocupa de los pe- riodos que han sido bautizados como Prelatte y Latte –en función de la inexistencia y posterior aparición de las grandes construcciones apoyadas en las sim- bólicas piedras–, periodos que conocemos gracias a la arqueología pero también a las fuentes europeas a partir del siglo xvi, en la medida en que reflejan pervi- vencias que podemos recontextualizar.
Imágenes de distintos sitios y proyectos arqueoló- gicos, como el Latte Project, nos ayudan a acercarnos a estas manifestaciones culturales. También algunos de los citados objetos de la colección del MNA, que ilustran los modos de vida de estas sociedades, con una economía basada en la pesca, la recolección y la agricultura a pequeña escala. La honda es un objeto característico de las sociedades chamorras tempranas y el MNA cuenta con un ejemplar singular, aunque de época colonial, se trata de uno de los ejemplares más antiguos conservados (Figura 5).
El recorrido por esta época se detiene en la figura de uno de los líderes chamorros, Quipuha, convertido en un icono contemporáneo de la identidad chamorra, al igual que el colgante con el que se le representa, llamado sinahi, el cual, con su forma de media luna, es el símbolo gráfico de esta área expositiva y algunos de ellos, en su versión actual, se exponen como muestra de esa recuperación del pasado para la construcción de la identidad contemporánea que también encarna el legendario jefe que se enfrentó a los españoles.
5.2. Periodo colonial español (1668-1898)
Del mismo modo que el «viaje» por esa primera etapa histórica y a través de la sala en que se habla de ella nos conduce ante la figura de Quipuha, ápice y epígono de una época, la «travesía» por la etapa y la sala sucesivas, como si fuera la otra cara de la misma moneda, arranca de la evocación de otra figura trascendente de la his- toria de las Marianas, artífice precisamente de la gran transformación que tuvo lugar a finales del siglo xvii: la de Diego Luis de San Vitores, gracias a la generosa colaboración de la Biblioteca Nacional.
Como en muchas otras regiones, la presencia espa- ñola en Guam y las Marianas se puede dividir en varias fases de acuerdo con los cambios en el «estilo de im- plantación». En este caso, cabe distinguir una primera fase –a partir de la llegada de Legazpi y Urdaneta en 1565– en la que se aprovechan las posibilidades estra- tégicas de Guam como escala en la ruta comercial con Oriente –la denominada como Galeón de Manila, otro importante paso en el proceso de «globalización» al co- nectar tres continentes de forma regular– pero no se interviene de forma directa sobre la organización y el modo de vida de la población local. En una segunda fase –tras la llegada de San Vitores en 1668 con un plan de evangelización y dominación integral de la «colonia»– se implantaron de manera forzosa nuevas formas de orga- nización administrativa, social, económica y, cómo no, nuevas creencias. La religión cristiana, con sus formas, sus ritos y sus códigos morales, llegó, de la mano de los jesuitas, a tener una presencia unificadora casi asfixiante en las islas. Por eso, la cruz será el icono que sintetice esta sección de la muestra que ocupa la segunda sala.
Su muerte a manos de los nativos lo convirtió en un mártir a ojos de los colonos, inmortalizado en imáge- nes como la obra de la colección de la Biblioteca Nacio- nal antes mencionada. Los jesuitas crearon las reduc- ciones en las que se llevó a cabo una profunda labor de
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Démosle la vuelta al relato: finalidad del proyecto I estoria-ta






















































































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