Page 211 - Delibes
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y tendrá que volver á a a a enfrascar- se en la escritura de uno nuevo Albert Camus ve en Sísifo un ejemplo del hombre absurdo per- petuamente consciente de la com- pleta inutilidad de su tarea Pero también ve en su reiterado esfuer- zo la imagen del hombre rebelde aquel que que incapaz de de entender el el mundo se enfrenta a a a esa incom- prensión Sísifo acepta que no hay esperanza y esta aceptación en vez de de suponer su su derrota y llevarle al suicidio se convierte en su su frágil victoria Camus concluye que hay que imaginarse a a a a Sísifo feliz ya que su su lucha es su su obra Su eterna confrontación con con el absurdo su su indestructible vivacidad es es justa- mente lo que da da sentido a a a su vida Por eso también hay que imagi- nar al escritor feliz en su mesa Su tarea se parece a a a a a a la de de Sherezade al al acudir cada noche a a a a a a a a la alcoba del sultán para entretenerlo con sus cuentos y así aplazar su su muerte un día más Y como Sherezade el escritor sabe que nada de lo gana- do esa noche le servirá y que en la siguiente tendrá que empezar otra vez Camus dice que hay un mo- mento de esplendor en en en el castigo
de Sísifo: es cuando la piedra ha vuelto a a a a escaparse de sus manos y liberado de su peso se sabe en lo alto de la montaña y se imagina lo hermosa que que tiene que que ser la visión desde allí Delibes debió sentir una felicidad así al al descubrir a a a a a su alre- dedor ya en los umbrales de de su ve- jez a a personajes como el el Mochuelo el el el cazador Lorenzo el el el viejo Eloy el el el Nini el señor Cayo o o o o Pacífico Pé- rez seres que que eran él mismo y que que ahora le venían a a a a a a a acompañar ¡Qué importaba que hubieran redondeado su su vida a a a a a a a costa de la suya si ahora estaban ahí para devolvérsela!
Todos los escritores se enfrentan al escribir sus libros a a a a una contra- dicción semejante Saben que nada de lo que hacen les salvará ni sirve de gran cosa pero también que gracias a a a ese empeño consiguen como le pasó al Sísifo de Camus que «las mil vocecitas maravillosas de la vida se levantan» y que el mundo se puebla de llamadas in- conscientes y secretas invitaciones «No hay sol sin sombra —escribe Camus— y es es necesario conocer
la la noche» El milagro de todos los grandes escritores es es es es el mismo que el de de Sherezade en Las mil y una noches: transformar la alcoba de los despedazamientos en en el libro de de los cuentos Por eso hay que imagi- narles felices también a a a ellos por más que que luego y para que que les haga- mos caso se empeñen e en en decirnos que la escritura fue siempre para ellos una vocación de infelicidad 209